En abril salió a la venta el Samsung Galaxy S6 Edge, el hermano que acompañó en la presentación y salida también al Samsung Galaxy S6. La diferencia entre uno y otro sólo se apoyó en que el primero ofrece una pantalla cóncava con funciones incluidas en sus laterales que supera todo lo que hasta ahora hemos visto en cuanto a un screen flexible.
Tanta es la buena repercusión de la inversión de la firma surcoreana que los ingenieros de DisplayMate decidieron acompañar la salida al mercado de ambas terminales con un estudio de punta a punta de pantalla. Estos chicos son de los que más saben del asunto y por eso, que firmen con sello y todo que el Samsung Galaxy S6 Edge tiene una poderosa pantalla es más que bueno.
Según afirman, el Samsung Galaxy S6 Edge cuenta con una calidad de pantalla flexible sobresaliente. Tanto la precisión de color, calibración, brillo, legibilidad y visibilidad lo posicionan como uno de los mejores equipos existentes en el mercado, aún por sobre sus terminales anteriores como el Galaxy S5 donde demuestran una superioridad de calidad que ronda el 30% en mejoras.
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